
El domingo 14 de abril de 2024, la Guardia Civil informó que habían detenido a un hombre en Málaga por agredir sexualmente y grabar imágenes íntimas de su hijastra, una menor de edad. El hombre había ocultado microcámaras en un peluche, una bombilla y un enchufe en el dormitorio y el baño de su casa durante dos años.
Según el comunicado emitido por la instituto armado, el sospechoso habría utilizado fármacos que producen somnolencia para dormir a la menor de edad y abusar de ella sexualmente en su casa ubicada en Mijas. La víctima contó a los agentes que el hombre le preparaba un té todas las noches, y después de tomarlo, siempre se sentía muy cansada.
Durante la búsqueda de la casa del sujeto, los oficiales encontraron dispositivos de almacenamiento USB con grabaciones íntimas en las que se ve al detenido agrediendo sexualmente a la menor, además de las cámaras y los diferentes medicamentos para inducir sueño. El acusado había estado viviendo con su pareja y la hija de esta durante siete años.
El caso salió a la luz después de que el novio de la menor encontrara una cámara oculta en un oso de peluche y alertó a la madre de la niña, quien inmediatamente denunció el hecho a la Guardia Civil. El hombre está acusado de delitos de agresión sexual, contra la intimidad y tenencia de pornografía infantil. Se cree que había estado grabando imágenes íntimas sexuales de la menor durante dos años, desde que ella tenía 16 años hasta que alcanzó la mayoría de edad.
La Guardia Civil precisó que el hombre se enteró de la denuncia interpuesta contra él y huyó inmediatamente de la casa en Mijas. Durante las siguientes tres semanas, se trasladó constantemente entre diferentes casas de alquiler a través de una conocida plataforma en línea.
Finalmente, los agentes localizaron y detuvieron al hombre cuando se dirigía a la estación de autobuses de Málaga, donde tenía guardado su ordenador en una consigna.
Tras ser presentado ante la autoridad judicial, se decretó su ingreso en prisión. Actualmente, los investigadores están realizando una exploración de su ordenador para determinar si existen más imágenes archivadas. Este caso resalta la necesidad de estar atentos y proteger a los menores de posibles agresiones y violaciones a su privacidad.