
Mariana Enriquez, autora nacida en Buenos Aires en 1973, ha logrado algo sin precedentes en la literatura de terror en español: endosar su obra a una editorial de literatura «seria». Enriquez, a pesar de ser una autora de terror, ha logrado esta hazaña gracias a su talento indiscutible.
Su éxito ha provocado que otras editoriales españolas estén considerando incluir en su catálogo novedades del género terrorífico, pero específicamente escritas por mujeres. Este movimiento parece ser una respuesta al éxito de Enriquez y una forma de aprovechar el actual interés en la literatura de doble género.
Enriquez ha publicado recientemente Un lugar soleado para gente sombría bajo la editorial Anagrama. A pesar de que algunos lectores pueden ver el título como un llamado a los entusiastas del terror para formar un club de siniestros incomprendidos, la autora ha demostrado su habilidad para el suspense y el terror en sus anteriores trabajos.
Entre sus obras anteriores, destacan relatos como El carrito en Los peligros de fumar en la cama (2009) y El chico sucio en Las cosas que perdimos en el fuego (2016). Sin embargo, su última novela, Nuestra parte de noche (Premio Herralde 2019), ha recibido críticas mixtas, con algunos lectores prefiriendo sus cuentos más medidaos.
Un lugar soleado para gente sombría consta de una docena de relatos, entre los que destacan Mis muertos tristes, que explora la decadencia urbana y moral de la Argentina de hoy a través de la mirada de un barrio inundado de fantasmas, y Los pájaros de la noche, una crónica surrealista sobre una familia maldita.
Enriquez también explora temas de familia y surrealismo en La desgracia en la cara. Aunque el lirismo prevalece en este relato, el terror sigue siendo un elemento clave. Otros cuentos, como Metamorfosis, juegan con el humor negro para cuestionar nuestras relaciones con nuestros cuerpos.
Enriquez también demuestra su habilidad para crear una atmósfera terrorífica en el relato que da título al libro. En este cuento, una periodista investiga el caso de una chica que aparece ahogada en el tanque de agua de un hotel de Los Ángeles donde se alojó un célebre asesino en serie.
Enriquez continúa su derrotero de horror con Los himnos de las hienas y Diferentes colores hechos de lágrimas, ambos textos son pavorosos en el mejor sentido y dejan al lector con el corazón a mil.
La autora argentina ha logrado, una vez más, regalarnos pedazos antológicos de la literatura de género. Con Un lugar soleado para gente sombría, Mariana Enriquez ha entregado posiblemente su libro de cuentos más sólido hasta la fecha. Sin duda alguna, Enriquez es una voz prominente en la literatura de terror en español, rompiendo barreras y abriendo nuevas puertas para el género.