
La ex cantante y figura pública del mundo de la música, Ana Isabel Iglesias, conocida por su nombre artístico Hanna, ha estado causando múltiples incidentes en varios establecimientos de la ciudad de Coslada. A la edad de 39 años, su comportamiento ha provocado altercados que han requerido la intervención de las autoridades. Uno de los incidentes más recientes ocurrió este pasado miércoles a las 19.30 horas, cuando Hanna, en estado de ebriedad, provocó un altercado en un bar de la avenida de Vicálvaro de Coslada. El personal del local se negó a servirle alcohol, lo que resultó en un enfrentamiento con los trabajadores y los clientes, y la ruptura de varios vasos.
Hanna se dio a conocer en la escena musical española cuando una de sus canciones, titulada ‘Como la vida’, del álbum ‘Pura Hanna’, se convirtió en la sintonía oficial de la Vuelta Ciclista a España 2007. Desde entonces, su notoriedad ha crecido, pero lamentablemente, en los últimos años, ha sido más conocida por su comportamiento violento y destructivo que por su música.
Los propietarios de bares y restaurantes en Coslada han denunciado que han estado soportando peleas y desórdenes provocados por Hanna durante los últimos cuatro años. A pesar de varias intervenciones policiales, juicios y condenas, la ex cantante no ha tomado medidas para corregir su comportamiento. En numerosas ocasiones, ha sido grabada agrediendo a los propietarios y a los clientes de los bares, rompiendo mobiliario y consumiendo las bebidas de los clientes.
Además, hace menos de un mes, causó más disturbios en varios bares y discotecas del barrio de Valleaguado, siempre en estado de ebriedad y obligando a la intervención de varias patrullas de la policía nacional y local. Los dueños de estos locales están hartos de su comportamiento violento y temen que pueda ocurrir un incidente grave si continúa con esta actitud.
En marzo del año pasado, Hanna provocó altercados en al menos seis bares, cafeterías y cervecerías ubicados en el barrio de El Puerto y en el casco urbano de Coslada. Después de ser expulsada de un local, continuó su periplo por otros cinco bares, causando desórdenes en todos ellos.
Durante estos periodos de caos, Hanna ha estado en su casa bajo arresto domiciliario como resultado de varias condenas judiciales. Sin embargo, una vez que se levanta el arresto, vuelve a las calles y repite su comportamiento destructivo.
En una ocasión, Hanna y un acompañante se dieron a la fuga después de no pagar a un taxista de Madrid que los había llevado a Coslada. Además de no pagar la tarifa, Hanna robó los únicos 50 euros que le quedaban a su acompañante, dejando al taxista sin cobrar por sus servicios.
En octubre de 2021, Hanna y su entonces pareja fueron detenidos por un delito de lesiones tras una agresión contra dos hombres fuera de un bar en la calle de Doctor Michavila de Coslada. Los dos hombres resultaron heridos, uno de ellos necesitó 10 puntos de sutura en la cabeza y el otro fue ingresado en el hospital con heridas graves.
Este incidente se produjo en la terraza del bar Plan B. Según las investigaciones, Hanna y su novio estaban discutiendo y los dos hombres intervinieron para mediar. Sin embargo, los heridos declararon que Hanna se enfrentó a ellos sin provocación. Posteriormente, su novio entró en la escena y golpeó a uno de los hombres en la cabeza. La pareja se dio a la fuga, pero no antes de que el novio de Hanna golpeara a otro hombre, que cayó al suelo y se golpeó la cabeza contra el bordillo.
Las víctimas fueron atendidas por la Polícia Local de Coslada. Uno de ellos, Féliz, de 59 años, fue trasladado al Hospital de La Princesa de Madrid con pronóstico grave. El otro hombre, Manuel, también de 59 años, fue llevado al Hospital de Coslada, donde fue tratado por una herida en la cabeza que requirió 10 puntos de sutura.
Estos incidentes han manchado la imagen de la ex cantante y han dejado a la comunidad de Coslada en un estado de constante inquietud y temor. La continua y aparentemente imparable serie de altercados provocados por Hanna ha llevado a un clamor generalizado por acciones más fuertes para frenar su comportamiento destructivo.