
La ópera ha sido durante mucho tiempo un género que ha fascinado a muchos y Álvaro del Amo no es la excepción. Conocido por su triple condición de melómano, libretista y crítico de El Mundo, Del Amo ha pasado años cultivando su amor por la ópera. Su última novela, Bufón, es un testimonio de esta pasión y ofrece una visión única y novedosa del género.
La novela, publicada por Eolas, es una obra literaria inusual y difícil de catalogar. Sin embargo, es quizás la demostración más eficaz y entretenida de que los personajes de la ópera no están desconectados de la realidad ni de los problemas cotidianos de las personas. Del Amo desafía la idea comúnmente aceptada de que la ópera es un género elitista y absurdo. En cambio, sostiene que la ópera se centra en el análisis, la reflexión y la plasmación de la experiencia humana en todas sus diversas formas.
Bufón está compuesto por cuatro historias, cada una centrada en un personaje diferente. La primera sigue a Víctor, el Rigoletto de Verdi, que trabaja para un jefe de una naviera gallega. Del Amo critica a los directores de escena que simplifican la compleja relación entre el padre y la hija en la ópera, convirtiendo a Rigoletto en un monstruo. En lugar de ello, Del Amo argumenta que se debería prestar más atención a las contradicciones y dilemas morales que enfrenta el personaje.
El segundo relato, Mariposas amorosas agonizantes, está inspirado en las diatribas eróticas de las hermanas Fiordiligi y Dorabella de Così fan tutte de Mozart. Del Amo considera esta ópera como una de las más misteriosas y contemporáneas del repertorio debido a su temática. Los personajes principales de la historia son dos jóvenes doctorandos que deciden poner a prueba la fidelidad de sus novias ante un prestigioso catedrático.
La tercera historia, La geisha, se centra en la Madama Butterfly de Puccini y está dedicada al maestro y cómplice Tomás Marco. La historia se desarrolla en Nueva York y los diálogos parecen sacados de una de las comedias serias de Woody Allen. Del Amo se pregunta qué ocurre con el hijo de la protagonista, Dolore, después de que ella se suicida.
El último relato, Libertino, sigue a los intérpretes de Don Giovanni de Mozart que buscan comprender a sus personajes. Del Amo explica que Don Giovanni es el personaje más criticado de la ópera, y por eso debe reinventarse en cada representación.
Bufón es la última obra de Del Amo, quien a sus 82 años continúa escribiendo ensayos, novelas y guiones. A pesar de la creencia común, Del Amo sostiene que la ópera mantiene una supremacía sobre el cine y el teatro. Aunque reconoce las limitaciones y contradicciones del género, cree que la ópera tiene una identidad clara, un público leal y un enorme potencial. Según él, la ópera tiene la capacidad de seguir profundizando en los temas importantes que aún nos preocupan.