
El ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), según sostiene la Guardia Civil, desvió al menos 3,8 millones de euros a la constructora Gruconsa y a la sociedad que explota el estadio de La Cartuja en Sevilla entre los ejercicios 2020 y 2022. Esta empresa, afirman los investigadores, transfería parte del dinero a una sociedad controlada por un íntimo amigo y socio de Luis Rubiales, Francisco Javier Martín Alcaide, alias Nene, bajo la denominación de Dismatec. Aseguran además que Rubiales ha estado percibiendo fondos procedentes de las empresas de su amigo en forma de «beneficios».
Un informe del Instituto Armado, que hace parte del sumario que instruye el Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda, revela que Gruconsa comenzó a desviar fondos a Dismatec en marzo de 2020, con una «periodicidad mensual y por idénticos importes en diferentes tramos temporales». La Guardia Civil alega que estas operaciones no han podido ser justificadas por algún tipo de servicio profesional y las presenta como comisiones ilegales.
Según el informe policial, «esta relación económica parece seguir activa a día de hoy», puesto que «el último pago reportado por la entidad bancaria corresponde al mes de enero». En total, afirman que Gruconsa terminó desviando a la sociedad controlada por Nene al menos 530.911 euros.
El informe destaca además que el delegado de la zona sur de España de Gruconsa era Ángel González Segura, hermano del jefe jurídico de Rubiales en la RFEF, Pedro González Segura. Según los investigadores, tanto Nene como «algunos de los cargos directivos de Gruconsa han coincidido en vuelos a la República Dominicana» durante los últimos tiempos.
La Guardia Civil presenta a Nene como «un ex jugador de fútbol fuertemente vinculado a la provincia de Granada y actualmente empresario en el sector de la compraventa de inmuebles y del turismo». Aseguran que «estas dos facetas le han labrado a lo largo de los años diversas relaciones entre las cuales en la actualidad se encuentran altos directivos de Gruconsa».
El informe sitúa la creación de Dismatec como «una relación causa-efecto con la contratación de Gruconsa por la RFEF». Aseguran que «no solo por la fecha de constitución de la misma sino por el hecho de que pocos días después de haber sido traspasada al control de Nene, la constructora comenzó a efectuar pagos con carácter mensual que se han prolongado hasta la actualidad«.
Finalmente, la Guardia Civil advierte la comisión de «delitos graves como la corrupción entre particulares, el blanqueo de capitales o la organización criminal» que atribuye a Rubiales y a sus principales colaboradores en la RFEF.