
El mundo del fútbol se ha vestido de luto con la noticia de la muerte de Luis Gil Torres, que en su última etapa profesional se desempeñaba como director de competiciones de LaLiga y previamente fue secretario general de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE). La noticia del fallecimiento fue dada a conocer por Javier Tebas, máximo dirigente del colectivo de clubes.
La partida de Gil ha dejado un hueco imborrable, pero también un legado de integridad y dedicación al fútbol, que se refleja en las palabras de Tebas: «Su partida nos deja un profundo vacío, pero también un legado de integridad y dedicación al fútbol, nos enseñó entre otras cosas esa visión desde el punto de vista del jugador profesional que necesitaba LaLiga», señaló en un mensaje publicado en su cuenta oficial.
No solo se recuerda a Gil por su contribución profesional, sino por su espíritu de compañerismo, lealtad y liderazgo que infundió en cada aspecto de su vida. «Recordamos hoy no solo su contribución profesional, sino también el espíritu de compañerismo, su lealtad y liderazgo desde la continua mejora, que infundió en cada aspecto de su vida. En este momento de duelo, elevamos pensamientos de fe, paz y consuelo para su familia y seres queridos», añadió el presidente de LaLiga.
En un gesto de respeto y homenaje, el estadio Santiago Bernabéu guardó este domingo un minuto de silencio por Gil antes de celebrar el Clásico.
Luis Gil, quien nació en Pobla de Vallbona el 28 de enero de 1976 y también era el responsable de la Oficina del Jugador de LaLiga desde julio de 2017, fue jugador profesional entre 1996 y 2010 en clubes como Mallorca, SD Logroñés, Gimnàstic de Tarragona, Murcia, Sevilla, Polideportivo Ejido, Elche, Tenerife, Alicante y Alcoyano.
Fue parte de la junta directiva y también gerente de AFE durante seis años hasta que se incorporó a LaLiga para dirigir el departamento de competiciones y la Oficina del Jugador. Desde su posición, participó activamente en trabajar en pro del bienestar de los futbolistas, la mejor coordinación posible con otras instituciones en la elaboración de los calendarios, el diseño de las competiciones, entre otros aspectos fundamentales para el desarrollo del fútbol profesional.
LaLiga, en un comunicado, lamentó la pérdida irreparable de Gil y recalca el vacío personal y profesional que deja en la industria del fútbol: «El vacío personal y profesional que deja Luis Gil, tanto en LaLiga como en la industria del fútbol es inmedible. Le echaremos de menos. Descansa en paz, amigo y compañero», agrega el escrito del colectivo de clubes, que envía «un enorme abrazo y toda la fuerza del mundo en estos difíciles momentos» especialmente a su mujer Lola y a sus hijos Gabriela y Luca.
LaLiga también destacó las cualidades humanas y profesionales que hicieron de Gil una figura esencial en el fútbol español: «Luis Gil era, por encima de todo, una grandísima persona, y uno de los mejores compañeros que se pueden tener. En lo profesional era de las personas más dedicadas y trabajadoras en la industria del fútbol, siempre atento, colaborativo y dispuesto a ayudar».