
El pasado fin de semana fue testigo de una actuación de un piloto en su mejor momento: Max Verstappen. En la pista de Shanghai, Verstappen no dio ninguna oportunidad a sus competidores de McLaren y Ferrari. A lo largo de las 56 vueltas de la carrera, el piloto principal de Red Bull no dejó ninguna opción para que los demás pilotos pudieran pelear por la victoria.
Un evento particularmente sorprendente fue la actuación de Lando Norris, que logró superar a Sergio Pérez para ocupar el segundo lugar en el podio. Esta sorpresa se debió en gran parte a la aparición de un safety car y a la estrategia de dos paradas que perjudicó al mexicano Pérez, en beneficio del británico Norris. Esta estrategia hizo que Norris fuera elegido como el piloto del día.
La carrera en China no aportó muchas más emociones. La regresión de Ferrari y la inferioridad mecánica de Aston Martin dejaron a Carlos Sainz y Fernando Alonso en el quinto y séptimo puesto, respectivamente. Verstappen, al cruzar la meta, admitió que su RB20 parecía ir sobre rieles, lo que le permitió mantener su liderazgo durante toda la carrera.
Alonso hizo un gran esfuerzo durante la carrera, incluso atacando a Pérez en la primera curva. Sin embargo, no pudo mantener su posición y terminó perdiendo cuatro posiciones. La competitividad del AMR24 de Aston Martin no pudo resistir el ritmo del McLaren de Norris, que logró adelantar a Alonso en la curva 14 gracias a su DRS.
Lewis Hamilton, por otro lado, tuvo una carrera de remontada. Partiendo desde la antepenúltima posición, luchó con más dedicación que de costumbre para terminar noveno. A pesar de que Mercedes está pasando por un momento difícil, la actuación de Hamilton demostró que todavía tienen la capacidad de competir.
En la vuelta 13, los dos Red Bull realizaron su parada en boxes. Este movimiento mostró la superioridad de Red Bull en esta carrera, ya que pudieron permitirse una doble parada para cambiar de neumáticos. En este punto de la carrera, se estaba examinando el ritmo de Ferrari y su ventaja hipotética sobre Mercedes y McLaren.
Valtteri Bottas tuvo un problema de avería en la vuelta 21 que provocó un virtual safety car. Esto proporcionó una oportunidad a Leclerc, pero debido a que los comisarios no pudieron retirar el Sauber de la pista, se tuvo que implementar un safety car. Esto permitió a Aston Martin apostar por neumáticos blandos para Alonso.
La estrategia que utilizó McLaren en esta carrera resultó ser muy efectiva. Norris, con su coche de una sola parada, fue capaz de mantenerse en la segunda posición, complicando la carrera para Pérez. Esta estrategia de McLaren resultó ser una verdadera amenaza para Red Bull.
Finalmente, Alonso tuvo que hacer una parada en boxes en la vuelta 43 para cambiar a neumáticos duros. Aunque esto hizo que cayera a la duodécima posición, los neumáticos duros le permitieron mantener el ritmo de los Red Bull y remontar hasta el séptimo lugar. En esta carrera, también se destacó la actuación de Nico Hulkenberg, que fue uno de los más consistentes de la parrilla.