
En una reñida competencia, el espíritu competitivo y la tenacidad física de Olympiacos determinaron el resultado del primer partido del playoff en el Palau. La escuadra dirigida por Giorgios Bartzokas logró desequilibrar al Barcelona que estaba lejos de su mejor rendimiento. El encuentro estuvo marcado por errores y faltas personales, lo que llevó a los azulgranas a perder la ventaja de jugar en casa. [Narración y estadísticas (75-77)]
La ausencia del capitán Kostas Papanikolaou no afectó en absoluto al actual subcampeón del torneo. A pesar de la pobre actuación de Thomas Walkup, quien se recuperó de una lesión en la espalda pero no pudo destacar en el campo. Los griegos también sufrieron el susto de Filip Petrusev, quien sufrió una torcedura de rodilla en la etapa final del partido.
El apoyo incondicional del Palau, volcado en su equipo y enfurecido ante las provocaciones de Isaiah Canaan, no fue suficiente para que el Barça pudiera imponer su juego creativo. Incluso con la contribución de Jabari Parker, que anotó 13 puntos y obtuvo siete rebotes, pero no pudo liderar el ataque en situaciones de alta presión.
Las primeras ventajas significativas para los visitantes fueron gracias a la movilidad interior de Petrusev, quien anotó 12 puntos en la primera mitad, llevando el marcador a 35-44 al descanso. Las alarmas se dispararon cuando Shaquielle McKissic y Nigel Williams-Goss comenzaron a destacar en el campo.
En un intento por levantar el espíritu del equipo, el Barça apretó en defensa, con la esperanza de que Nico Laprovittola pudiera marcar la diferencia. Sin embargo, dos aciertos consecutivos de McKissic, el segundo tras un robo a Ricky Rubio, volvieron a dar la ventaja de diez puntos al equipo griego con cinco minutos para el final del partido (59-69). A partir de ese momento, el partido se volvió un carrusel de cambios.
Los triples de Rubio y Laprovittola fueron respondidos con otro lanzamiento de Canaan y un 2+1 de Nikola Milutinovic en el último segundo de la posesión. La precipitación de Parker fue seguida de una rigurosa falta en ataque de Milutinov. Ni siquiera un clamoroso error de Walkup, con una pérdida ante Ricky castigada con falta antideportiva, insufló suficientes ánimos al Barça.
Canaan, con molestias en una pierna, y su equipo mantenían una pequeña ventaja (72-75). Esa posesión había sido diseñada para Willy Hernangómez, pero el internacional español no pudo jugar el dos para dos previsto con Laprovittola. El último ataque, marcado por la lesión de Petrusev, fue resuelto con dos tiros libres de Giannoulis Larentzakis con solo 35 segundos restantes. Ni siquiera el asombroso mate de Parker, con el reloj casi en cero, fue suficiente para desmoronar al sólido Olympiacos.