
Estudiantes universitarios franceses se unen a la protesta global con respecto a la guerra en Gaza
París, Francia – El centro de París está enloquecido. En medio de contenedores de basura, barricadas de bicicletas y palos de madera, dos jóvenes, Francesco y Martin, de 22 años, ondean una bandera palestina en la puerta de la histórica sede de Sciencespo, una prestigiosa universidad francesa. Ambos llevan mascarillas para ocultar sus rostros y corean eslóganes en apoyo a Gaza. «Vamos tapados por seguridad«, dice Francesco, «por temor a sanciones disciplinarias, o a que la extrema derecha nos identifique«.
Desde las ventanas del edificio, varios jóvenes con sus rostros también cubiertos con pañuelos palestinos miran hacia la calle. Cuelgan pancartas con la palabra «guerra» tachada y se lee debajo «genocidio«. Marie, una de las manifestantes, con un pañuelo palestino alrededor del cuello, dice: «Siempre hay una respuesta represiva cuando queremos denunciar la masacre que está ocurriendo en Gaza».
Este grupo de estudiantes, que según sus cálculos son casi un centenar, se han atrincherado en la histórica sede de Sciencespo, conocida por su carácter combativo, en protesta por lo que llaman «genocidio en Gaza«. Se solidarizan con los estudiantes que manifiestan en las universidades de los Estados Unidos y otros lugares del mundo.
Martin, uno de los manifestantes, explica: «Vamos a seguir aquí el tiempo que haga falta. Será la dirección del centro o la policía los que decidan si nos vamos o no«. Añade que algunos de los compañeros que se manifiestan han sufrido sanciones disciplinarias y otros han sido amenazados. Su amigo Francesco añade: «Queremos que la universidad francesa se movilice, desde La Sorbona hasta Nanterre. Este es un combate internacional«.
Yassine, también manifestante, denuncia: «Esto es algo que se va a extender. Hay represión contra todo lo que tiene que ver con una expresión política sobre Palestina y eso es inquietante«. Según él, la facultad de Sciencespo, que conoce bien la historia, no está llevando a cabo una protesta militante. «Aquí se criminaliza a la gente que protesta contra un genocidio mientras que los que matan se presentan como víctimas. Estos estudiantes sufren intimidaciones, es algo nunca visto en democracia», denuncia.
Este movimiento de protesta no es exclusivo de Francia. En Estados Unidos, los estudiantes de la Universidad de Columbia llevan días ocupando el campus en protesta por la guerra en Gaza y este movimiento se ha extendido por las universidades estadounidenses, algunas de ellas de las más prestigiosas como Harvard, Yale o Princeton.
La dirección del centro de Sciencespo ha decidido cerrar las otras sedes y planea reunirse con los estudiantes. Los manifestantes exigen que se levanten las sanciones a los alumnos penalizados, que el centro condene los ataques de Israel en Gaza, que se cree un espacio «de debate donde se pueda analizar, no de manera militante, sino histórica y técnica, lo que está ocurriendo» y que se investiguen las colaboraciones que tiene Sciencespo con universidades israelíes.
La protesta ha atraído ya la atención de la clase política. La ministra de Enseñanza Superior, Sylvie Retailleau, ha dicho: «Debate sí, bloqueo no«. En la concentración de este viernes había algunos diputados de La Francia Insumisa, un partido de extrema izquierda que lleva manifestándose a favor de Palestina desde los ataques del 7 de octubre. «Sois el honor de este país», ha dicho su líder, Jean Luc Mélenchon.
Este movimiento estudiantil en Francia es combativo y bebe de la herencia de mayo del 68. Y parece que estos estudiantes están dispuestos a llevar adelante esa herencia, sin importar las consecuencias. Como dijo Martin, «estaremos aquí el tiempo que haga falta«.