
En un intento desesperado y dramático por salvar una vida, los equipos de rescate en el sur de la India están trabajando incansablemente para liberar a un niño de dos años que cayó en un pozo a más de cinco metros de profundidad. El incidente ocurrió en el estado de Karnataka, y ha capturado la atención de todo el país, según informan fuentes oficiales.
El niño desafortunado se encontró atrapado en este estrecho pozo en el poblado de Lachayan, cerca de su casa. Según Atin Kumar, el superintendente de la Policía de la región de Indi, las operaciones de rescate han estado en curso durante más de 16 horas. Los esfuerzos para rescatar al niño están en la fase final, según el subinspector de la Policía de Indi, Manjunath, y podría ser cuestión de horas antes de que se complete el rescate.
El rescate ha requerido un esfuerzo conjunto de varias agencias gubernamentales. En total, alrededor de 100 personas están participando en el rescate, incluyendo personal de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres (NDRF) y de la Fuerza Estatal (SDRF), así como policías y bomberos. Mientras tanto, las autoridades también han convocado a médicos y han puesto en espera una ambulancia para trasladar al niño al hospital tan pronto como sea liberado.
La administración del distrito ha recibido instrucciones de llevar a cabo una operación a marchas forzadas para proteger al niño, según el ministro de Comercio e Industria de Karnataka, M. B. Patil. Las actualizaciones sobre el progreso del rescate se están compartiendo instantáneamente a través de las redes sociales.
Para poder llegar al niño, los equipos de rescate excavararon un túnel adyacente al pozo y aseguraron el flujo de oxígeno a través de una serie de tubos, asegurándose así de que el niño siguiera con vida. Las imágenes de las operaciones de rescate en la zona fueron transmitidas por la televisión delhi NDTV, proporcionando un relato visual impresionante de los esfuerzos de rescate.
Este incidente trágico recuerda una situación similar que ocurrió en junio del año pasado en la India, en el estado central de Madhya Pradesh. En aquella ocasión, una niña de dos años quedó atrapada en un pozo de cien metros de profundidad. A pesar de más de cincuenta horas de operaciones de rescate, los equipos hallaron el cuerpo sin vida de la menor.
Este último accidente pone de relieve la necesidad de tomar medidas preventivas para evitar tales incidentes. La seguridad de los niños en las zonas rurales de la India, donde estos pozos abiertos son comunes, es una preocupación creciente. Mientras tanto, los equipos de rescate continúan trabajando con la esperanza de que este incidente tenga un desenlace diferente y puedan liberar al niño con vida.