
El reciente dictamen del Tribunal Supremo ha confirmado una vez más el atroz historial delictivo del conocido depredador sexual, José Enrique Abun Gey, apodado «El Chicle». Esta última sentencia, que impone 14 años de prisión a Abun Gey por agredir sexualmente a su cuñada, la hermana gemela de su ex esposa, cuando ella solo tenía 17 años, añade un nuevo y oscuro capítulo a su ya abominable récord criminal.
Esta violación, perpetrada el 17 de enero de 2005, fue el primer delito de una larga lista que Abun Gey iría acumulando a lo largo de los años. Tras su detención por el asesinato de Diana Quer en 2017, la Audiencia Provincial de A Coruña y más tarde el Tribunal Supremo encontraron pruebas suficientes para confirmar que él fue el autor de este brutal acto.
La notoriedad de «El Chicle» llegó a su apogeo cuando fue arrestado por el asesinato de Diana Quer, ocurrido en la noche del 22 de agosto de 2016. No obstante, su detención no se produjo hasta el 29 de diciembre de 2017. Esta es la cuarta condena de Abun Gey, quien también ha sido sentenciado a prisión permanente revisable por el asesinato de Diana Quer, a cinco años de prisión por secuestrar e intentar violar a una chica en la localidad coruesa de Boiro, y a dos años y medio por tráfico de drogas.
El caso fue revisado por el Supremo tras un recurso presentado por Abun Gey, quien argumentó que los hechos estaban a punto de prescribir según la ley, dado que el caso se archivó inicialmente en agosto de 2005 y no se reabrió hasta marzo de 2018. No obstante, el tribunal, conformado por los magistrados Andrés Martínez Arrieta, Andrés Palomo, Pablo Llarena, Vicente Magro y Leopoldo Puente, desestimó su solicitud.
El Tribunal Supremo sostiene que la víctima siempre mantuvo que fue violada y «El Chicle» no proporcionó ninguna información que justificara la atenuación de su responsabilidad. Además, los magistrados argumentaron que, en lugar de resultar perjudicado por la demora en el proceso, fue la víctima quien sufrió las consecuencias.
La sentencia del tribunal incluye la prohibición de comunicarse con la víctima y de acercarse a ella durante 22 años, así como el pago de una indemnización de 30.000 euros. Según los informes, la mujer ha experimentado «cambios sustanciales en su vida cotidiana, con repercusiones negativas en sus relaciones sociales, familiares, sexuales y afectivas» como resultado de la agresión.
Los hechos ocurrieron el 17 de enero de 2005 cuando «El Chicle», aprovechándose de su relación familiar con la víctima, la convenció para que se subiera a su coche y la llevó a un parque poco frecuentado. Allí, amenazó a la joven con un cuchillo y la violó. Después, le advirtió que si contaba a alguien lo ocurrido, mataría a ella, a su hermana y a la hija de su hermana, que también era su hija, antes de suicidarse.
Tanto el acusado como su defensa intentaron desacreditar a la víctima señalando supuestas contradicciones y una declaración inventada. Sin embargo, el tribunal concluyó que la mujer mantuvo de forma constante la misma versión «coherente» de los hechos desde 2005, cuando le contó lo ocurrido a una amiga y a su hermana.