
El gobierno español está considerando una propuesta que podría cambiar la forma en que se utiliza el agua en la industria alimentaria. La propuesta, que ha generado una considerable controversia, sugiere permitir el uso de agua reutilizada en la producción de alimentos, lo que podría reducir hasta un tercio del consumo total de agua en estos procesos productivos.
Varios ministerios están involucrados en este debate, incluyendo el de Sanidad, Consumo y Agricultura. No obstante, la decisión final recaerá en el departamento de Transición Ecológica que dirige la ministra Teresa Ribera.
La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), la principal patronal del sector, ha estado presionando para que se les permita un acceso prioritario al agua y ha advertido que la sequía podría desembocar en una escasez de alimentos. Los empresarios del sector argumentan que han estado trabajando durante años para optimizar el uso del agua en sus procesos de producción sin poner en riesgo la seguridad alimentaria.
En un paso adelante, han pedido al gobierno que permita el uso de agua reutilizada en la industria de alimentos y bebidas para la limpieza de superficies, objetos y materiales que están en contacto con los alimentos. Esta práctica está actualmente prohibida por la regulación existente.
Mauricio García de Quevedo, director general de FIAB, afirma que existe una mayoría favorable a la reutilización de agua dentro de la administración, pero problemas de competencias han impedido la aprobación de esta medida.
La FIAB ha presentado su solicitud a los ministerios de Agricultura, Transición Ecológica, Consumo y Sanidad, así como a la Presidencia del Gobierno. Sin embargo, no está claro cuál de estos organismos tiene la última palabra sobre esta cuestión.
Fuentes del ministerio de Consumo han confirmado que están al tanto de la problemática y que están evaluando la situación. Por su parte, desde Agricultura se hace una valoración positiva de la propuesta de la industria alimentaria, siempre y cuando se den las garantías necesarias para la salud.
El ministerio de Sanidad ha explicado que las competencias en este ámbito recaen en la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, que depende del Ministerio de Consumo, aunque han remitido el asunto a Transición Ecológica.
Paloma Sánchez Pello, directora de Competitividad y Sostenibilidad de FIAB, explica que el real decreto que está tramitando el Ministerio de Transición Ecológica mantiene la prohibición del uso de agua reutilizada en la industria de alimentación y bebidas. Su petición es que se elimine esta prohibición y se permita el uso de aguas regeneradas para la limpieza de materia prima, instalaciones y artículos en contacto con alimentos, siempre cumpliendo con los requisitos de seguridad alimentaria y sanidad.
Sánchez Pello pone como ejemplo a países como Francia, donde se ha aprobado una medida similar. Según estimaciones del gobierno francés, la reutilización y el reciclaje de agua podrían permitir ahorros significativos en la industria agroalimentaria, de entre el 20% y el 25% de la extracción de agua.
El real decreto que tiene Teresa Ribera está incluido en el Plan Anual Normativo de 2024, elaborado por el Ministerio de la Presidencia. El siguiente paso es su aprobación por parte del Consejo Asesor de Medioambiente y su posterior debate en el Consejo de Ministros.
A pesar de las incertidumbres actuales, desde FIAB se espera un análisis serio y que la modificación salga adelante, ya que está todo en el aire por una cuestión de competencias. La propuesta de reutilizar el agua en la industria alimentaria podría ser una medida revolucionaria en la gestión de recursos y en la lucha contra la escasez de agua, pero antes de que se tome una decisión, es esencial garantizar la seguridad y la salud pública.