
En la actualidad política española, el Comité Federal del PSOE se reúne este sábado, y la notable ausencia será la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Esta reunión había sido programada antes de que Sánchez pusiera en suspenso su futuro político, con la intención de aprobar la candidatura para las elecciones europeas, pero el enfoque ha cambiado para convertirse en una defensa masiva del líder ausente.
En un giro sorprendente, la lista de candidatos para las elecciones del 9 de junio no será discutida, y la aprobación de Teresa Ribera como número uno de la misma será la única acción concreta que se tomará. Este cambio fue decidido in extremis y la lista de candidatos se retrasará hasta el martes.
En un movimiento sin precedentes, las intervenciones de los asistentes que tomen la palabra se harán públicas. Esto es un cambio significativo, ya que normalmente estas intervenciones se realizan a puerta cerrada, excepto por los minutos iniciales del discurso del secretario general del partido. Además, se instalarán pantallas en la calle Ferraz de Madrid para que las personas que asistan a la concentración de apoyo puedan escucharlas.
Las federaciones de al menos nueve regiones han fletado autobuses para facilitar el traslado de sus afiliados a la capital. Esta manifestación, difundida a través de las redes sociales bajo el lema Basta de silencio cómplice, no ha sido oficialmente convocada ni respaldada por la cúpula socialista. Sin embargo, a pesar de la falta de respaldo oficial, los dirigentes del partido señalan que las movilizaciones son impulsadas por la militancia.
Los principales barones regionales del partido planean asistir al Comité Federal y expresar su apoyo explícito a Sánchez. Entre ellos se encuentran los secretarios generales de Andalucía, Juan Espadas, Comunidad Valenciana, Diana Morant, Madrid, Juan Lobato, y el primer secretario del PSC, Salvador Illa. Illa interrumpirá su campaña electoral en Cataluña para volver a expresar su apoyo incondicional a Sánchez. También se espera la presencia y participación del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien, a pesar de ser crítico con la gestión del Gobierno, se ha sumado a la unidad del partido en esta ocasión.
Las federaciones han mostrado un apoyo unánime a Sánchez y han expresado su comprensión por el cambio en el propósito de la reunión del Comité Federal. Atribuyen esta decisión a la extraordinaria y no prevista decisión del secretario general que ha provocado un retraso en el proceso interno.
El PSOE se encuentra en una situación precaria, con Sánchez considerando su dimisión tras la investigación abierta a su esposa, Begoña Gómez, por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. En Ferraz, se busca reforzar el mensaje de que Sánchez es víctima de una campaña de la derecha y la ultraderecha para invalidar un gobierno progresista legítimo.
Hasta la tarde del viernes, se esperaba que una veintena de autobuses de todas las provincias de Castilla y León, 12 de la Comunidad Valenciana, siete del País Vasco, seis de Aragón, tres de Galicia, varios con 300 personas desde Asturias y un número no especificado desde La Rioja, Navarra, Murcia y Andalucía, se desplazaran a Madrid para una gran movilización.