
Caitlin Clark, la estrella en ascenso del baloncesto femenino, continúa revolucionando el mundo del deporte en Estados Unidos. Nacida en Des Moines, EEUU, en 2002, Clark ha demostrado ser un fenómeno en la cancha, no solo por su habilidad para anotar puntos, sino también por su fuerte personalidad y carisma que la han llevado a ser una sensación en los medios y en el mercado comercial.
Su capacidad para anotar puntos ha sido insuperable, superando récords históricos de anotación que parecían inalcanzables. Ha superado consecutivamente las marcas de Lynette Woodard y Pete Maravich, que habían durado cinco décadas. Su habilidad para anotar ha atraído a multitudes a los partidos de la Universidad de Iowa, donde juega, generando una gran expectación y audiencias millonarias.
Clark, que comenzó a jugar en un equipo de chicos en su Des Moines natal debido a la falta de equipos femeninos, ha sido elogiada por su fuerte carácter y habilidad para manejar la presión. Amaya Valdemoro, una ex jugadora de baloncesto, ha hablado muy bien de ella, destacando su habilidad para manejar la presión y su trash talking.
Se espera que Clark, sin duda, sea la número uno en el próximo draft de la WNBA, donde jugará para las Indiana Fever. Su llegada a la WNBA ha generado una expectación similar a la que generó Victor Wembanyama hace un año.
Clark ha sido comparada con Steph Curry, una comparación que incluso el propio Curry ha reconocido. Curry, la estrella de los Guerreros, ha elogiado a Clark por su capacidad de tiro y la similitud de su forma de jugar con la suya. Clark también ha superado los números de Curry, incluyendo su récord de 162 triples en una temporada universitaria.
Clark se ha destacado en su última temporada con las Hawkeyes, promediando 32,2 puntos y 8,7 asistencias. Su progresión ha sido constante, incrementando su promedio de puntos con cada temporada que pasa. Su rendimiento en la cancha ha sido el resultado de su talento natural y su obsesivo trabajo. Además de sus entrenamientos regulares, Clark dedica una hora al día a su rutina de tiros, lanzando 500 tiros divididos en cinco fases.
Más allá de su habilidad para anotar puntos, Clark también ha sido elogiada por su habilidad para controlar los espacios, pasar y rebotear. Xavi López, asistente del equipo femenino de la Universidad Cristiana de Texas, ha destacado la fuerza de Clark en la cancha, a pesar de su aparente fragilidad física.
Clark ha tenido un gran impacto en el mundo del baloncesto femenino, no solo en términos de su habilidad en la cancha, sino también en términos de su popularidad y su capacidad para atraer a las audiencias. Su impacto ha llevado a algunos a compararla con Larry Bird, no solo por su habilidad en la cancha, sino también por su trash talking y su apariencia física.
Además de su impacto en la cancha, Clark también ha tenido un impacto económico significativo. Sus acuerdos de patrocinio, que incluyen a marcas como Nike y Gatorade, ya le han generado más de tres millones de dólares en ingresos, incluso antes de haber entrado en la WNBA.
Clark ha decidido forjar su propio camino en un lugar donde aún no han logrado ganar, la Universidad de Iowa. Esto habla de su carácter y su disposición para asumir cualquier desafío. Según López, lo más importante que ha logrado Clark es que se hable más del March Madness femenino que del masculino, algo que antes era impensable.