
Apple, la popular empresa de tecnología, ha recientemente cambiado una de las reglas más polémicas de la AppStore – la tienda de aplicaciones de iOS. Ahora, los desarrolladores se encuentran en la capacidad de crear y distribuir emuladores de consolas y sistemas informáticos, algo que estaba prohibido desde la inauguración de la tienda en 2008.
Anteriormente, algunos desarrolladores habían logrado introducir emuladores en la AppStore, pero sólo mediante la ocultación de su funcionalidad, y su permanencia en la tienda era efímera, durando sólo unas horas o días en el mejor de los casos.
Este cambio en las normas, que se ha llevado a cabo en gran medida debido a la presión de la Ley de Mercados Digitales Europea, se aplica a nivel global. Por lo tanto, se espera que la AppStore comience a recibir pronto los primeros emuladores compatibles con el iPhone.
Sin embargo, los primeros emuladores que se han introducido bajo estas nuevas leyes, han durado apenas unas horas en la tienda. Uno de los primeros emuladores que se distribuyó fue el iGBA. Esta aplicación tenía la capacidad de ejecutar juegos y aplicaciones diseñados para la Game Boy Advance en el iPhone o iPad. Pese a que varios medios especializados en Apple informaron sobre este lanzamiento, la aplicación desapareció de la tienda a las pocas horas.
Según Apple, la eliminación del iGBA no se debe a que sea un emulador, sino a que utilizaba el código de un emulador similar, el GBA4iOS, y por tener una cantidad excesiva de publicidad. El GBA4iOS es un emulador conocido de las consolas Game Boy que hasta ahora se necesitaba instalar utilizando métodos alternativos, como la tienda AltStore o un iPhone modificado para aceptar software de fuentes no oficiales, también conocido como jailbreak.
Otro emulador que tuvo una vida corta en la tienda fue el Bimmy, un programa capaz de ejecutar juegos y aplicaciones de la consola Nintendo Entertainment System (NES). Esta aplicación se lanzó oficialmente con un precio de 0,99 euros, pero fue retirada de la tienda a las pocas horas.
En este caso, el desarrollador decidió eliminar la aplicación por temor a las represalias. Aunque Apple ahora permite estas aplicaciones, la compañía no se hace responsable de las consecuencias legales que puedan tener para el desarrollador, exigiendo que se siga la legislación local pertinente.
Los emuladores, sin embargo, suelen ser mal vistos por las compañías de videojuegos y fabricantes de consolas, y Nintendo es una de las empresas que persigue su distribución de forma más activa. Tom Salvo, el desarrollador de Bimmy, ha aclarado que no ha recibido ninguna presión para eliminar la aplicación, pero decidió no correr el riesgo.
Esta reciente decisión de Apple de permitir emuladores en la AppStore supone un cambio significativo en la política de la compañía y abre un nuevo panorama para los desarrolladores de aplicaciones y emuladores. Aunque los primeros intentos de introducir emuladores en la tienda han sido efímeros, este nuevo escenario plantea interesantes posibilidades para el futuro de la distribución de software en la plataforma de Apple.
El desafío para los desarrolladores será ahora crear emuladores que cumplan con las normas de la AppStore y que, al mismo tiempo, eviten conflictos legales con las empresas de videojuegos y fabricantes de consolas. Este cambio en la política de Apple también plantea preguntas sobre cómo la compañía manejará posibles problemas legales que puedan surgir a raíz de esta nueva flexibilidad en su tienda de aplicaciones.
El cambio de reglas por parte de Apple es también un reflejo de las presiones regulatorias que enfrentan las grandes empresas de tecnología. La Ley de Mercados Digitales Europea, que ha jugado un papel en la decisión de Apple, es un ejemplo de cómo las leyes y regulaciones pueden influir en las políticas internas de las empresas de tecnología.
En resumen, el hecho de que Apple ahora permita emuladores en su AppStore supone un cambio importante en la política de la empresa y una nueva oportunidad para los desarrolladores de software. Aunque los primeros intentos de introducir emuladores en la tienda no han sido exitosos, este cambio en las reglas plantea interesantes perspectivas para el futuro de la distribución de software en la plataforma de Apple.